JÁNICO, SANTIAGO. – Lo que en principio fue un reto agotador para Melina Cruz, una madre de familia del municipio Jánico, en Santiago, quien durante el confinamiento tiene que lidiar día tras día con los quehaceres del hogar y las tareas de sus niñas, se convirtió en una experiencia satisfactoria.
Melina y su esposo Kedwin Alcántara, son los padres de Nathalia y Daniela Alcántara, estudiantes de la escuela Dr. Arturo Grullón, del Distrito Educativo 08-02, de Jánico, un municipio caracterizado por gente solidaria, con gran sentido de colaboración y servicio.
Como familia aprendieron a sobrellevar el confinamiento en casa, a consecuencia de la pandemia del COVID-19, con dosis de amor, entrega y compromiso con la labor escolar y con los deberes cotidianos del hogar.
«No les voy a negar que en principio fue un reto bastante difícil y agotador», admitió la madre de familia.
Sin embargo, para ella esa dinámica diaria les ha permitido fortalecer el vínculo familiar.
«Mami ha sido una buena maestra y nos ha ayudado mucho», expresó Daniela, estudiante de Pre Primario.
Mientras que Nathalia, quien cursa el segundo grado de Primaria afirmó que «papi y mami han hecho un trabajo muy importante para nosotras».
Para esta familia, la coordinación de las labores del hogar con las tareas asignadas a las niñas por sus maestros de manera virtual fue mejorando con el paso del tiempo.
La madre dijo que se ha dado cuenta en esta crisis sanitaria que vive el país que trabajar con niños en la casa no es una tarea fácil.