SANTO DOMINGO .- El empleo público en República Dominicana se incrementó casi un 31 % en los últimos cinco años, de acuerdo a un estudio realizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en el que analiza la calidad y eficiencia del servicio civil público.
El organismo relató que en abril del año pasado se registraban 486,732 trabajadores en la nómina pública, una cantidad que contrasta con los 371,949 empleados de cinco años antes. Se trata de un aumento de 114,783 trabajadores más en un quinquenio.
Con el resultado, el número de empleados en el sector gobierno representó un 4,7% de la población dominicana. Para 2014, cuando el BID hizo el mismo estudio, el crecimiento en cinco años de la nómina pública había sido de 3.8 %. El mayor aumento en el último lustro, dice el multilateral, indica que el empleo en el sector público ha crecido más que la población.
“Ya en 2014 RD se ubicaba entre los países con la mayor proporción de la población empleada en el sector público en un estudio comparado”, dijo.
No obstante, el BID no considera que existan excedentes o déficit de personal significativos, así como señala que el coste global de las plantillas públicas se sitúa dentro de parámetros razonables y compatibles con la economía del país.
De hecho, el estudio señala que la estructura de remuneraciones es adecuada “para atraer, motivar y retener” a los empleados del sector público, y que los costes salariales no son excesivos, en relación con los de mercado, en ningún sector o nivel de puestos.
Lo que sí ocurre es que persiste “ciertos problemas de competitividad externa”, especialmente en los niveles más altos de la administración pública. En los altos cargos se registran niveles de sueldos “muy por debajo de su equivalente en el sector privado”, aunque no ocurre así en los niveles medios y bajos.
Brecha de género en altos niveles
La brecha salarial entre géneros se ha reducido en los últimos años, según indica el informe del multilateral.
No obstante, el BID indicó que existe “una brecha importante” de género en cargos de viceministros que “deja en evidencia la desigualdad en materia de acceso a posiciones vinculadas al ejercicio de autoridad y toma de decisiones”. Otra forma en que el BID lo explica es por el desbalance salarial entre hombres y mujeres viceministros porque “cuando ellas ocupan dichos cargos, tienden a hacerlo en instituciones que pagan salarios más bajos”.
En otros niveles directivos y de supervisión los hombres suelen ganar más que las mujeres y ello ha aumentado en los últimos años. Ello “probablemente tiene su explicación en que los nuevos nombramientos realizados en los últimos tres años en instituciones con remuneraciones más altas han beneficiado de forma desproporcionada a hombres”.
