NUEVA YORK .- La Asociación de Bodegas de América (UBA, por sus siglas en inglés), solicitó al dominicano Fausto Pichardo que revoque su solicitud de renuncia como jefe de la División de Patrulla del Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York (NYPD).
Para dicho colectivo, el retiro de Pichardo deja huérfanos a los comerciantes dominicanos, que tenían sus esperanzas centradas en que una persona que se identificara con la comunidad los protegiera.
“Ver a un profesional de la talla de Pichardo al frente de una unidad tan importante de la Policía nos llenó de satisfacción y esperanzas, pues siempre habíamos luchado por una policía que se identifique, conozca y entienda a nuestra comunidad”, dijo Radhamés Rodríguez, presidente de la organización.
La salida de Pichardo, de 43 años de edad, desilusiona a los bodegueros, quienes se mostraron sorprendidos por su abrupto retiro.
“Su retiro nos desilusiona y nos pone marcha atrás en ese anhelo de ver cada vez más reflejada a nuestras comunidades en las fuerzas policiales encargadas de protegernos. Pichardo es un oficial brillante y que tiene mucho que dar para nuestra comunidad y esperamos volverlo a ver en servicio”, afirmó el presidente de UBA.
Los bodegueros resaltaron la incansable labor de Fausto Pichardo, designado en diciembre del pasado año, y expresaron su solidaridad y satisfacción porque fue el primer jefe de patrullas en Nueva York de origen dominicano.
“Día tras día, los bodegueros estamos en la línea del frente en la interacción directa con la comunidad y sabemos lo importante que es tener una protección policial eficiente y justa, por eso UBA seguirá trabajando por una policía profesional, que refleje nuestros valores y que proteja a nuestras familias con firmeza. Necesitamos y vamos a apoyar líderes en la ciudad que entiendan eso”, puntualizó Rodríguez.
El pasado 14 de octubre el oficial Fausto Pichardo anunció de manera oficial su retiro a través de su cuenta de Twitter, publicación que aprovechó para agradecer a los hombres y mujeres de la policía de Nueva York por el extraordinario trabajo que realizan día tras día para todos los neoyorquinos.
“Cada interacción que tiene es una oportunidad para forjar un vínculo mayor con aquellos a quienes servimos”, dijo Pichardo.
