SANTO DOMINGO .- Se trataba de “dos atracadores, ampliamente conocidos” en La Romana, los dos jóvenes que fueron ultimados a tiros por agentes de la Policía Nacional en esa provincia mientras estaban esposados.
La versión de que Ángel Chanel Consoró Rosado, de 25 años, y de Eddy Antonio García (a) La Peseta, de 24 años, eran delincuentes es del director de la uniformada, Ney Aldrin Bautista Almonte, quien, no obstante, dejó claro que la entidad no tolerará “los excesos”, como definió la muerte de los hombres, ocurrida el domingo.
Al ser cuestionado por la prensa sobre el tema, el director de la Policía calificó el hecho como “muy simple”.
“El caso de La Romana es muy simple, unos atracadores, que todo el pueblo de La Romana sabe que son atracadores, que han estado detenidos, acaban de hacer un asalto, la Policía llegó, le dio persecución y una patrulla, la información que tengo hasta este momento, una patrulla llegó, entonces le insistieron, le dieron un tiro en una pierna y procedieron a esposarlos y luego llegó otra patrulla y entonces cometió un exceso”, dijo.
Bautista Almonte se refirió al tema luego de participar en una rueda de prensa sobre el preolímpico de voleibol, realizada en el restaurante Il Cappuccino, en el Distrito Nacional.
No obstante, el oficial dejó claro que la institución no está de acuerdo con la conducta de los agentes, al plantear que “nunca vamos a estar de acuerdo con los excesos, vamos a ser enérgicos con eso”.
También dijo que él, como director de la Policía Nacional, no puede tomar una decisión sobre el caso y que debe acogerse al proceso. “Pero no puedo yo tomar una decisión a la ligera sin que antes eso agote un proceso de investigación transparente como lo hemos hecho hasta este momento”.
Ángel Chanel Consoró Rosado y de Eddy Antonio García (a) La Peseta fueron ultimados por agentes de la Policía la tarde del domingo en la entrada de la comunidad Los Maestros, en el municipio Villa Hermosa, provincia La Romana. En un video que circuló en las redes sociales se observan a los cuerpos esposados tirados en el pavimento en un charco de sangre, mientras policías y civiles los observan y firman.
Tras darse a conocer el hecho, la Policía anunció que iniciaría una investigación y hoy dio a conocer que suspendió a cuatro agentes por el caso. Se trata de un cabo y tres rasos, cuyos nombres no fueron ofrecidos por la uniformada.
