(Bloomberg) — McDonald’s (MCD) ha despedido a su máximo ejecutivo, Steve Easterbrook, por mantener una relación consensuada con una empleada, perdiendo al directivo que logró impulsar las ventas de la compañía con los desayunos durante todo el día y que dirigió la iniciativa de la compañía hacia las entregas y los pedidos digitales.

La junta de la cadena de hamburguesas votó el viernes a favor del despido de Easterbrook, de 52 años de edad, después de investigar la relación, que violaba la política de la compañía, según un comunicado difundido por el grupo el domingo. La política de McDonald’s no permite que el líder de la empresa mantenga relaciones con otro empleado de la compañía. Chris Kempczinski, quien dirige las operaciones en Estados Unidos, fue ascendido a presidente y responsable ejecutivo.

“Fue un error”, dijo Easterbrook sobre sus acciones en un correo electrónico enviado a los empleados el domingo. “Dados los valores de la compañía, estoy de acuerdo con la junta en que es hora de me marche”.

A Easterbrook se les consideraba implacable en sus esfuerzos por captar a una nueva generación de clientes dispuestos a realizar pedidos a través de aplicaciones móviles, realizar pagos digitalmente y elegir la entrega de las comidas en los domicios o en el trabajo en lugar de acudir a los puntos de venta. Para impulsar la urgencia, relacionó la compensación de los ejecutivos con el ritmo y el alcance de la introducción de la entrega, y trabajó con proveedores como UberEats.

La estrategia está dando frutos: las ventas en mismas tiendas, una medición clave del éxito, se recuperaron con la llegada del desayuno de todo el día, el rechazo de productos deficientes y la introducción de artículos nuevos y de menús de menor precio para atraer a clientes. McDonald’s casi ha duplicado su valor en bolsa desde que asumió el cargo en marzo de 2015, más del doble del avance del índice S&P 500.

“Se puede argumentar muy firmemente que Easterbrook era el mejor líder ejecutivo en la industria de restaurantes”, dijo Michael Halen, quien cubre el sector de Bloomberg Intelligence. La acción cerró a US$193,94 por acción el 1 de noviembre, lo que confiere al grupo una capitalización de mercado de US$147.300 millones.

Los cambios de Easterbrook hicieron que algunos franquiciados se molestaran por los gastos impuestos desde la sede de la empresa en Chicago.

El grupo independiente de franquiciados de McDonald’s, la Asociación Nacional de Propietarios, no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios. Los propietarios de los establecimientos van a mantener una conferencia telefónica privada para hablar sobre cómo responder y proteger la marca, según una persona familiarizada con su plan que pidió que no se revelara su identidad.

Familias y niños

“Las grandes empresas cotizadas tienen menos probabilidades de tolerar tal comportamiento debido a la preocupación por el riesgo a la reputación”, escribió en un correo electrónico Yuen Teen Mak, profesor de NUS Business School en Singapur. “La naturaleza del negocio también puede ser un factor; después de todo, la clientela objetivo son las familias y los niños”.

Independientemente de los éxitos de Easterbrook, el consejo de la compañía tenía poco margen de error en la gestión de la transgresión del ejecutivo británico en un momento en que incluso las relaciones consensuadas son objeto de escrutinio, especialmente cuando hay un desequilibrio de poder. En mayo, la compañía renovó su política de acoso por la presión de los empleados, activistas laborales y miembros del Congreso.

En una carta en respuesta a una consulta de la senadora estadounidense Tammy Duckworth, del estado Illinois, Easterbrook dijo que la compañía había mejorado su política y está comprometida “a garantizar un lugar de trabajo libre de acoso y parcialidad”.